USO pide desterrar de las administraciones la figura del "personal de confianza"
Esta figura debe reducirse, a su juicio, a casos muy concretos
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La Unión Sindical Obrera (USO) de Soria ha valorado positivamente la iniciativa de la Junta de Castilla y León para proteger a los empleados públicos que denuncien episodios de corrupción en la Administración de la Comunidad. Pero ha pedido mejorarla en la tramitación del anteproyecto.
Para el sindicato, esta ley regional debe tener un carácter ambicioso, si no se quiere convertir esta posible iniciativa de regeneración en una especie de nuevo buzón de quejas y sugerencias.
Como fundamental medida de acompañamiento de este proyecto de Ley, USO ha resaltado que es urgente desterrar de todas las administraciones públicas la profusa figura del "personal de confianza" que medra a la sombra de los partidos políticos, "personal muchas veces camuflado merced a procedimientos hechos a medida del futuro contratado".
La figura de este personal, muchas veces "colocado" como "asesor", debe reducirse exponencialmente, a su juicio, a casos muy concretos y en número muy reducido.
Para el sindicato, las mejores labores de asesoría y del estricto control de la legalidad residen en el propio personal de las administraciones públicas, especialmente en la figura de los funcionarios de carrera.
Por ello, USO ha propuesto una valoración detallada del gasto que supone este personal, comprometido más con "su pesebre particular" que con el servicio a los ciudadanos.
Con independencia del máximo respeto a las figuras de personal estatutario y laboral en aquellas ocupaciones que correspondan, a juicio de la USO Soria, la mayor parte del elevado número de cargo de libre designación y asesoría deben ser prestados por funcionarios de carrera.
Reposición
Además ha abogado por eliminar las actuales limitaciones a la reposición de efectivos, que sin embargo no afecta a este personal "elegido a dedo", convocando con urgencia procesos selectivos que cubran estas vacantes, en virtud de los correspondientes procesos de oposición, con estricto cumplimiento de los principios de publicidad, igualdad, mérito y capacidad, que tantas veces se inculcan en procesos "electivos" que pueden tener la consideración de impresentables paripés.
Para el sindicato, la independencia de los empleados públicos es el mejor antídoto para evitar los recurrentes abusos y fraudes de ley que acostumbran a acompañar la acción de gobierno de todas las administraciones públicas, especialmente de aquellas gobernadas por mayoria absoluta.
