TRIBUNA / Vía libre a 1.304 viviendas en el Cerro de los Moros
Ricardo Mínguez crítica en este artículo de opinión el desastre del Cerro de los Moros. Las "explicaciones" triunfales" del concejal de Urbanismo sobre la próxima reanudación del expediente del Cerro de los Moros siembran la alarma en quienes siguen confiando en la salvación de ese paraje para el buen nombre y futuro de Soria.
Patrimonio autoriza proyecto de obras para Centro Nacional de Fotografía
Ruta por diez edificios modernistas en Soria
TRIBUNA / Vía libre a 1.304 viviendas en el Cerro de los Moros
Estulticia, desvergüenza, tomadura de pelo, falta de respeto a los sorianos. Cualquier expresión negativa o descalificadora valdría para señalar que políticos como el todavía no cesado concejal de urbanismo del Ayuntamiento de Soria, el también diputado Sr. Rey, no representan con dignidad a los sorianos ni están cualificados para tomar decisiones que afecten al conjunto de la ciudadanía. Y viene esto a cuento de sus declaraciones del viernes pasado -19 de enero- sobre el expediente del Cerro de los Moros.
Lo que trasciende de la información publicada en los medios es un concejal exultante porque el Ayuntamiento ha recibido el esperado informe de Patrimonio (Cultural) de la Junta de Castilla y León que, según él, “obliga” al Ayuntamiento a continuar la tramitación del expediente para estudiar cómo coño meter las 1.304 viviendas en la zona de Valobos, ya que el informe recibido no ve objeciones paisajísticas al proyecto (que, por otra parte, ya sitúa perfectamente los 84 bloques de viviendas) y “se muestra favorable a su tramitación”. Habrá que leer el susodicho informe (una cosa es no poner objeciones y otra bien distinta mostrarse favorable a su tramitación, cosa impensable en un informe oficial), pero qué se puede esperar de quien ya afirmó en Comisión informativa del Ayuntamiento que el mirador del Castillo era para contemplar la ermita de San Saturio, y no el Cerro de los Moros.
Ah, y que ahora tendrán que “dar respuesta a las alegaciones”, es decir, anuncia no que las vayan a estudiar, que sería su obligación legal, sino que las van a contestar con el más absoluto rechazo (¿cómo si no, adelanta el inmediato estudio de ver si encajan las 1.304 viviendas “allí abajo”?). El lenguaje y la hipersuficiencia de los ignorantes son traidores y delatan a los mentirosos. Y ¿qué es eso de ver si caben las 1.304 viviendas “allí abajo”, y si no lo ven posible (?) compensar a la empresa con edificabilidad en otras zonas? Oiga, si el Ayuntamiento, no usted, no lo ve posible, su obligación es denegar la aprobación provisional de la propuesta y punto final. ¿O el Ayuntamiento trabaja para el promotor? ¿Se lo van a contar al fiscal? No todo es negociable por la Administración.
LOS INFORMES SECTORIALES. El Pleno extraordinario de 03/03/2023 acordó dos cosas: solicitar a las Administraciones que ya habían emitido un primer informe sobre el proyecto, un nuevo informe que certificara si el documento sometido a información pública cumple las prescripciones impuestas en aquél, y suspender el plazo legal para la aprobación provisional del proyecto por el MÁXIMO legal de tres meses, acogiéndose al Artº 22 de la Ley de Procedimiento Administrativo, que establece asimismo que “en caso de no recibirse el informe en el plazo indicado, proseguirá el procedimiento”.
Es decir, que ya EN JUNIO DE 2023 el Ayuntamiento estaba obligado a continuar la tramitación del expediente y a RESOLVER LAS ALEGACIONES PRESENTADAS EN LA INFORMACIÓN PÚBLICA. ¿Han hecho algo en estos siete meses? Nada de nada. Desde julio de 2022 (fin de la información pública) no han resuelto nada sobre las alegaciones presentadas, que nada tienen que ver con los informes sectoriales, pero que contienen argumentos sustanciales que sí impiden la tramitación del proyecto.
Pero hay más. Los principales informes sectoriales en este expediente son los de Protección Civil, Urbanismo y Vivienda, Patrimonio Cultural y Medio Ambiente, todos ellos de la Junta de Castilla y León, y vinculantes con excepción del de Medio Ambiente, que se supone emite la Dirección General de Patrimonio Natural y debe ser el que ha aireado el concejal aún no cesado. No sabemos, no se ha informado, sobre la posible recepción de otros segundos informes en plazo o fuera de éste. Veamos:
-Protección Civil: En cuanto a riesgos naturales o tecnológicos. Remitió informe de fecha 15/3/2022 en el que requería la presentación de un análisis de riesgos para su evaluación.
-Urbanismo y Vivienda: Remitió un informe el 12/4/2022 con una importante serie de prescripciones, algunas claramente incumplidas por el proyecto.
-Patrimonio Cultural: Remitió un informe el 11/4/2022 requiriendo la presentación de un obligado catálogo de bienes arqueológicos en el Sector que no se incluye en el proyecto.
-Medio Ambiente: Remitió un primer informe (no vinculante) el 04/10/2022 con una serie de RECOMENDACIONES para la protección del paisaje, a las que según parece habría contestado el promotor motivando un nuevo informe de la Junta que habría desatado la euforia del todavía concejal de urbanismo.
-Nada se ha dicho sobre la carencia en el proyecto de la preceptiva EVALUACIÓN AMBIENTAL ESTRATÉGICA ORDINARIA (de larga y compleja tramitación), sin la cual no puede tramitarse la propuesta MP-27 de modificación puntual del Plan General de Urbanismo. Así es la Ley. El promotor aportó en enero de 2023 un documento (no incluido en la documentación sometida a información pública) basado en el resultado de una evaluación ambiental estratégica simplificada (de rápida tramitación, pero no válida para este proyecto) que se realizó para una propuesta anterior completamente diferente de la sometida a información pública (se pasa, por ejemplo, de edificios de 4 plantas a bloques de 6 plantas con ilegales áticos), a lo que el Ayuntamiento ha respondido con el acostumbrado, aunque no sorprendente, SILENCIO. Y sí, hay silencios que hablan, silencios acusadores.
En resumen: el concejal de urbanismo aún no cesado presentó con albricias y alharacas, y con sólo ¡siete meses fuera de plazo!, un informe que según él no ve afecciones negativas al paisaje, como talismán para poder acometer la tropelía de aprobar un proyecto para construir 84 bloques de viviendas de 6 plantas, para 1.304 viviendas en el Cerro de los Moros. Eso sí, haciendo caso omiso de los informes de Urbanismo y Vivienda, de los informes de instituciones soberanas en cuanto a estudios del patrimonio cultural y paisajístico como la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS), el Centro Internacional Para la Conservación del Patrimonio (CICOP), la asociación Hispania Nostra que incluyó el Cerro de los Moros en la Lista Roja del Patrimonio, y, claro está, de las alegaciones presentadas al proyecto en la información pública del mismo.
Alcalde y concejal ignoran y desprecian en sus declaraciones (no en sus actuaciones oficiales, que son inexistentes) la misma definición de PATRIMONIO NATURAL como el conjunto de bienes y recursos de la naturaleza con valor relevante medioambiental, paisajístico, científico o cultural (Artº 3.27 de la Ley del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad), que debieran considerar al tratar el Cerro de los Moros. Hasta mintieron descaradamente nuestros próceres afirmando que habían solicitado la declaración BIC (Bien de Interés Cultural) de la margen derecha del Duero en su tramo soriano, incluido el Cerro de los Moros.
LAS VISUALES
Para ser breve. Desde el nivel del terreno en la mal llamada vaguada de Valobos, donde el no cesado concejal va “a ver cómo encajan” las 1.304 viviendas en 84 bloques de seis plantas, se divisa sin problema la ermita de San Saturio, ergo desde la ermita se divisa el terreno y se divisarán mejor los proyectados bloques de seis plantas, eso sí, ¡sin afección negativa al paisaje! (Como ya “explicó” en el Consejo de Urbanismo de julio de 2021 la arquitecta del equipo del promotor, desde San Saturio sólo se verán los de la primera línea, porque los restantes los ocultarán los primeros; olvidó que desde el Castillo se verán TODOS). No pregunto, afirmo: nos toman por idiotas, pero se equivocan, somos víctimas de su insensatez y comunión con un aberrante proyecto que será la vergüenza de Soria para generaciones futuras.
El Plan General de Urbanismo preveía bloques de cuatro alturas (baja más tres, sin áticos, prohibidos en edificación abierta) y el proyecto sometido a información pública, con la aquiescencia de alcalde y concejal, los proyecta con seis alturas (baja, más cuatro, más áticos-igual de prohibidos que antes-). ¿Y tiene el cuajo de decir que no afectan al paisaje sin reírse de quienes le escuchan, se supone que alucinados? ¿A quién pretende engañar? ¿Qué respondieron los concejales del Partido Popular?
UN MÍNIMO DE VERGÜENZA
Si alcalde y concejal la tuvieran, convocarían de inmediato un Consejo Sectorial de Medio Ambiente y Urbanismo para escuchar las voces de los sorianos y recoger sus posibles propuestas para solucionar con limpieza y transparencia uno de los problemas más graves a los que se enfrenta Soria, con un Ayuntamiento que parece atado de pies y manos por un promotor que ya ha sido condenado por corrupción urbanística. Desgraciadamente queda poco o ningún espacio para la esperanza. Sus nombres quedarán para la historia de las atrocidades urbanas.
Hagamos nuestro el romano eslogan de Leonor del Río: Soria servanda est, ¡hay que salvar Soria! ¡SALVEMOS SORIA!
Fdo: Ricardo Mínguez, Ingeniero de Caminos, soriano