EL PRIMER DEBATE DEL ESTADO del municipio de la legislatura ha servido para poner de manifiesto que quedan todavía muchas cosas por hacer en la ciudad.
La Soria real que hoy conocemos dista mucho de las promesas y compromisos que los diferentes partidos políticos nos han venido planteando en los últimos años. Lo primero en lo que los representantes políticos del Ayuntamiento de Soria deben ponerse de acuerdo es en el modelo de ciudad que quieren para sus ciudadanos, un proyecto de ciudad en la que todos los colectivos pueden y deben participar y que es la clave de decisiones posteriores. Hoy por hoy, se va a salto de mata sin un camino claro de hacia donde queremos dirigirnos y por qué camino pretendemos hacerlo. Por encima de reproches y descalificaciones mutuas, todos los partidos deben hacer autocrítica y reconducir, de verdad, un diálogo sincero, para evitar que la ciudad vuelva a perder nuevos trenes en otra legislatura más. Consideramos positivo que se retome la idea de un pacto por Soria, centrado en los proyectos importantes que marcan que acumulan ya demasiados retrasos: La nueva depuradora de aguas residuales, la segunda fase de las márgenes del Duero, la estación intermodal, el arreglo de las travesías, el inicio de las obras del mercado de abastos y viviendas a precio asequible para jóvenes son una base para que todos los partidos -y en especial el que gobierna- trabajen y lleguen acuerdos para atraer inversiones, de tal forma que cambien la imagen negativa que hoy tienen los ciudadanos sobre el devenir cotidiano del Ayuntamiento de Soria.