La secretaria de estado de Política Social ponía esta semana la primera piedra de un proyecto de referencia estatal que responde, sin lugar a dudas, a una de las necesidades de Soria y su medio rural como es la atención a sus mayores.
Serán 4,5 millones de euros los que el Gobierno de España invierta en este centro con vocación de ser pionero en la investigación e innovación en terapias y el desarrollo de servicios en el medio rural y que servirá de modelo para otras comunidades autónomas. Es, por tanto, una buena noticia para los sorianos, más si se considera que en el 2010 -más a finales que al inicio del año-, el centro abrirá sus puertas con la contratación de trabajadores cualificados y con empleo estable. Pero la buena noticia en el avance de plazos, no oculta los retrasos que ha sufrido este proyecto, desde que el entonces ministro de Trabajo y Asuntos Sociales lo comprometiera para ser una realidad antes de terminar la legislatura 2004-08, o desde que la propia secretaria de Estado asegurase, en septiembre de 2007, que antes de finalizar el primer trimestre de 2008 se iniciarían las obras, como es fácil constatar en las hemerotecas. No es el único proyecto enfocado a los mayores en la ciudad que acumula retrasos. El centro de día de Santa Bárbara tiene pendiente todavía la firma del convenio entre la Junta y el Ayuntamiento, después de mantener ambas administraciones durante años un pulso que sólo ha servido para dilatar los compromisos y ejecuciones y que merece una explicación razonada a los posibles usuarios, necesitados, como están, de esta dotación.