Cuando se traiciona la confianza y los compromisos
EL NINGUNEO QUE SUFRE estos días la Plataforma Soria Ya por quienes hace poco se daban codazos por compartir con ellos la cabecera de la manifestación en contra del olvido institucional es sólo una prueba más del poco interés que tiene el Gobierno de España en cumplir con los compromisos asumidos por escrito con esta tierra.
Las declaraciones del delegado del Gobierno en Castilla y León negando que hubiese un compromiso para planificar y ejecutar una línea de alta velocidad que uniera Valladolid con Zaragoza a través de Soria no es más que la confirmación de un fraude político. Los políticos deberían saber ya que no se solucionan los problemas, negándolos; ni se convence a nadie, repitiendo medias verdades estadísticas hasta la saciedad, en un afán por ganar tiempo que choca con la cruda realidad. La ejecución de las grandes infraestructuras de la provincia está muy lejos de las expectativas comprometidas. Es hora ya de que los agentes sociales y económicos de la provincia digan en voz alta que no se puede estar incumpliendo sistemáticamente plazos y defraudando acuerdos. Soria sigue esperando que se le dé una explicación más convincente a tanto incumplimiento. Necesitamos políticos más documentados, más responsables y más sensatos y no simples vendedores de humo, capaces de negar lo evidente sin atisbo de sonrojo. Quien no cumple lo que en su día comprometió, lejos a buscar excusas de mal pagador, lo que debe es asumir su responsabilidad y dejar de engañar a una sociedad cansada ya de tanto político de ocasión.