Como alcalde vuestro que soy os debo una explicación
HA PASADO MEDIO SIGLO desde que Luis García Berlanga -fallecido esta semana- dejase para la historia del cine la película Bienvenido Mister Marshall y desde que el actor Pepe Isbert protagonizase una de las citas míticas del cine español cuando desde el balcón municipal de un pueblo llamado Villar del Río abriese un pregón a sus vecinos con la frase Como alcalde vuestro que soy os debo una explicación, y esa explicación os la voy a dar porque os la debo.
Medio siglo después, en Soria, hemos vivido esta semana dos pasajes protagonizados por sendos dirigentes políticos que también nos puede servir de termómetro en la España que vivimos y la Soria que sufrimos. Soria se tiene bien ganada la fama de hospitalidad con sus visitantes, pero cuando éstos son dirigentes políticos sólo les pide que aporten soluciones, o cuando menos explicaciones, al buen ramillete de problemas que presenta la provincia. Es el caso por ejemplo, del impulso dado por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino a la Tierra de la Trufa. O a la dieta mediterránea reconocida como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad y que tendrá a Soria como ciudad emblemática en España. Pero cuando se llega a Soria para no concretar gran cosa del proyecto cultural en la antigua sede del Banco de España -en el caso de la ministra de Cultura- o se desprecia un grave problema de la provincia como la alta siniestralidad en las carreteras por la irrupción de animales silvestres -en el caso del director general de Tráfico-, estos dirigentes políticos, ciertamente, nos deben una explicación.