Autovía del Duero, un corredor más que prioritario
EL TIJERETAZO DECRETADO POR el Gobierno de España en las infraestructuras para reducir el déficit público ha disparado las alarmas sobre nuevos retrasos en las que la provincia lleva esperando demasiado tiempo y en especial la autovía del Duero, un corredor que ha vuelto a ser calificado de prioritario por el secretario general del PSOE-PSCyL en su visita a Soria pero que sigue acumulando aplazamientos injusticados.
El Gobierno de España tiene que garantizar sin más démoras la financiación de este corredor, que arrastra una auténtica letanía en su desarrollo y ejecución en las dos últimas décadas. El recorte de las infraestructuras no debe ser soportados por todos los territorios por igual. Sería una auténtica paradoja y una soberana injusticia que se suprimiese obra pública de la provincia que, según las propias estadísticas del INE, más alejada está de la cohesión territorial y social -dentro de la Comunidad y de España-. Soria está hoy a la cola, como lo estaba hace veinte años, en el reparto nacional y autonómico de kilómetros de autopistas y autovías por 1.000 kilómetros cuadrados de superficie. En este tiempo, otros territorios han pasado por la derecha -autovía del Camino de Santiago- o por la izquierda -autovía Ávila-Salamanca- a la autovía del Duero, a pesar de figurar como prioritaria en los discursos oficiales de los dos partidos con responsabilidades de Gobierno. Los partidos deben dejarse de engañar al solitario y, lo que es peor, creerse sus propias mentiras. La única alternativa es abrir un horizonte cierto para un corredor al que no puede condenarse a más retrasos.