CyL | Castilla y León

UGT y CEOE coinciden en datos preocupantes del paro

UGT y CEOE Castilla y León han coincidido en valorar como preocupantes los datos del paro en la Comunidad al cierre de marzo.

El número de desempleados registrados en marzo ha descendido en 3.759 personas en relación on el mes anterior (-2,15%). De esta forma, el paro registrado en Castilla y León se ha situado
en 170.993 personas.

Pero, según ha subrayado UGT, el dato interanual índica un incremento del paro en 18.349 personas (+12,02%) 21,59% más en el último año.
“Este descenso no debe de impedirnos ver la realidad que habla de 170.993 personas en desempleo, 31.360 personas en ERTE y 22.000 autónomos en cese de actividad”, ha señalado el secretario de Política Sindical, Industrial y Empleo de UGT Castilla y León, Raúl Santa Eufemia.
En cuanto a la reactivación económica, la ha definido como “desigual y muy parcial” puesto que la contratación acumulada en el primer trimestre de 2021 sigue siendo alrededor del 17% inferior al mismo periodo del año pasado, es decir, 33.000 contratos menos, descenso que también afecta a los contratos indefinidos (1.289 menos que hace un año). Y en cuanto a la afiliación a la Seguridad Social, cabe destacar que en los últimos seis meses se han perdido 26.000 afiliados en alta.
“Es más necesario que nunca seguir con la cobertura de los ERTEs, que protegen a empresas y trabajadores para que el desempleo no se dispare aún más, lo que llevaría a unas tasas del 20%”, ha advertido.

En este sentido ha hecho hincapié en que las tasas de paro entre las mujeres ya es del 20% (19,66%) en Castilla y León, superándose en Ávila (23,42%), León (22,22%), Salamanca (22,43%) y Zamora (22,59%), tanto a nivel autonómico como respecto a la media nacional que se sitúa en el 21,21%. De hecho, son las mismas provincias cuya tasa de paro total supera también la media de Castilla y León (15.82%) y de España (17,38%).
“Esta es otra de las consecuencias de la pandemia, que los desequilibrios históricos relativos a las disparidades por provincias, género y edad se están agravando”, ha indicado Santa Eufemia.
El responsable de la política sindical, industrial y empleo de UGTCyL, ha señalado a la Junta de Castilla y León a la hora de buscar responsabilidades respecto a la falta de ayudas directas.

“Si somos una de las Comunidades con mayor número de vacunaciones, la administración autonómica tendría que adoptar otras medidas que apoyen la liquidez de los empresarios y de ayudas a los trabajadores en ERTE que, por ejemplo, podrían haber sido publicadas hoy en el Bocyl junto con el cierre de la hostelería y no seis meses después”, ha apuntado.
“Es necesario mantener las rentas de las personas que no han podido volver a recuperar la actividad en su puesto de trabajo”, ha sentenciado Santa Eufemia.

Datos preocupantes

Por su parte, para CEOE de Castilla y León, los dados del paro en la región reflejan una preocupante parálisis del mercado laboral en Castilla y León, al registrarse una subida del 12,02 por ciento, 18.340 desempleados más, en comparación con el año anterior, a pesar de que en términos relativos se haya producido una caída del 2,15% respecto a febrero, superándose nuevamente la barrera de los 170.000 parados (170.993).

A ello se une que, en marzo, la cifra de afiliación a la Seguridad Social se situó 899.595 en Castilla y León, un 0,71% menos que en el mismo mes del año anterior, con algo más de 6.400 afiliados menos que hace un año, en el momento previo a la pandemia, cuando la cifra de afiliados alcanzó los 905.998.

Los datos, sin perspectivas de mejora, ponen de relieve la concentración de la destrucción de empleo y de los trabajadores en ERTES en el sector servicios (117.832 parados), principalmente en hostelería, hotelería, actividades artísticas y recreativas, agencias de viaje y comercio.

Además, en opinión de CEOE Castilla y León, con estas cifras resulta evidente que las medidas están resultando insuficientes y que las empresas necesitan más apoyo y verdaderas ayudas económicas directas que les permitan garantizar su supervivencia a corto plazo y así superar una destrucción de puestos de trabajo difícilmente superable.

No resulta positivo para las empresas de la Comunidad y, consecuentemente, para la creación de empleo, la incertidumbre que para las mismas genera el hecho de no saber cuál va ser la evolución de las medidas de desescalada que afectan directamente a su actividad.

En este sentido, CEOE Castilla y León ha mostrado una vez más su preocupación por las recientes medidas restrictivas adoptadas en relación a diversos municipios, que se ceba especialmente en algunos sectores de la actividad económica, y que hacen imprescindible agilizar las ayudas directas a los sectores afectados.  

Igualmente, para los empresarios de Castilla y León resulta urgente impulsar el calendario de vacunación para frenar las restricciones y provocar una reacción del sector económico en su conjunto de manera que se evite la destrucción de mayor tejido empresarial y del empleo.