Detenidas dos mujeres por comprar con recetas falsas un fármaco utilizado para elaborar "karkubi"
La Policía ha detenido a dos mujeres, vecinas de una localidad del sur de la comunidad de Madrid, como supuestas autoras de un delito de falsedad documental y otro contra la salud pública cometidos al usar recetas médicas falsificadas para obtener un psicotrópico en farmacias, Rivotril.
Investigado un vecino barcelonés por permitir a su hijo menor conducir un quad
Detenido un hombre que agredió a tres personas en un bar de Almenar
Las detenidas, T.N.M., de 36 años, y M.S.M.S., de 28, supuestamente adquirieron con recetas falsas este medicamento, que necesita prescripción facultativa y que se utiliza en el diseño de drogas, especialmente en Marruecos, han informado hoy fuentes de la Subdelegación del Gobierno en un comunicado.
El Cuerpo Nacional de Policía ha intervenido a las mujeres arrestadas seiscientos comprimidos de Rivotril, veintisiete recetas médicas falsificadas, dos tarjetas sanitarias de la Comunidad de Madrid y setenta euros.
El valor de los comprimidos intervenidos y de los que pudieran haberse conseguido con las recetas también intervenidas se ha calculado en 7.300 euros en el mercado ilícito.
El Rivotril es un medicamento considerado psicotrópico perteneciente al grupo de las benzodiacepinas que tiene, entre otros, efectos sedantes e hipnóticos, y que puede provocar graves daños a la salud, por lo que es obligatoria la prescripción médica a través de la correspondiente receta para su consumo.
El uso de este tipo de sustancias se puede desviar al tráfico o mercado ilícito para uso lúdico o incluso a drogodependientes de sustancias estimulantes que las pueden utilizar como calmantes.
El fármaco es un medicamento, pero también se utiliza como sustancia precursora para la elaboración de una droga denominada "karkubi" en la que además de este fármaco, se mezclan hachís, alcohol o pegamento.
Alerta
La Policía fue alertada por el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Soria, en el sentido de que varias personas estaban intentando comprar ese medicamento en varias farmacias de esta ciudad usando, probablemente, recetas falsas.
Funcionarios de la Comisaria montaron un dispositivo policial destinado a la localización de dichas personas y las detectó en el interior de un vehículo estacionado en el aparcamiento del Centro Comercial "Las Camaretas", cerca de Soria capital.
El "modus operandi" de la actuación delictiva consistía en falsificar recetas médicas mediante la obtención ilícita de los datos del médico que expide la receta, (su nombre, apellidos y número de colegiado) y los datos de identidad de la persona beneficiaria de la receta, acompañada de una tarjeta médica.
Según los investigadores, esos datos se obtuvieron también de forma fraudulenta.
Los datos de los facultativos se obtuvieron de la sustracción de un sello médico para recetas del Hospital de Torrejón de Ardoz (Madrid), mientras que los datos de la paciente los podrían haber obtenido de la sustracción de una de las tarjetas médicas en la localidad de Coslada (Madrid) cuando su propietaria estaba ingresada en el hospital de dicha localidad.
Por último, la receta física pudieron haberla conseguido con la sustracción de recetas de un centro médico denunciada en la localidad madrileña de Tres Cantos