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Exposición fotográfica sobre proyectos de desarrollo en El Salvador

Tierra sin Males organiza una exposición fotográfica en el casino Amistad Numancia del 20 de noviembre al 1 de diciembre.

La muestra está formada por 45 fotos en color, de los municipios de Suchitoto, Tejutepeque y Jutiapa, en la región de Cabañas-Cuscatlan de El Salvador.

Las protagonistas son las mujeres que participan de los proyectos que Tierra sin Males viene realizando en aquella zona desde 2008. 

Muchas de ellas son madres de familia. Les tocó pasar la guerra civil que  asoló al país durante 12 años hasta el 1992, perdieron en la contienda a seres queridos, como hijos y marido y tuvieron que salir de sus aldeas de origen, huyendo de las masacres indiscriminadas de la guerra. Terminada ésta, volvieron a sus pueblos que encontraron destrozados.

Gracias a la solidaridad internacional y en concreto a las subvenciones de la Junta de Castilla y León a través de la ONG Tierra sin males, durante los últimos cinco años 482 de estas mujeres han participado en diversos proyectos de desarrollo agrario, ejecutados por Cordes, la contraparte local.

Indirectamente se han beneficiados otras 2.500 personas más, según ha explicado Tierra Sin Males en un comunicado.

En estos proyectos, además de facilitarles simientes y platines de hortalizas, abonos orgánicos y técnicas de agricultura ecológica para sus huertos, las mujeres participan en jornadas de formación en Derechos Humanos, Medio ambiente y Igualdad de género.

Así se capacitan para participar activamente en las organizaciones sociales de su comunidad e incluso en los Ayuntamiento, impulsando políticas municipales en esos temas.

Además de las fotografías, la exposición presenta un video donde se percibe el trabajo realizado, la transformación de estas mujeres y el agradecimiento que manifiestan a la Junta de Castilla y León, a Tierra sin Males y a Cordes.

Muestras como eéta nos clarifican varios temas: 1) la solidaridad internacional es necesaria, sobre todo a países y sectores más vulnerables, para que poco a poco puedan ejercer sus derechos humanos básicos, 2)  el dinero que se les envía llega y es bien gestionado. 3) Se percibe el buen hacer de las ONGs fomentando la solidaridad internacional.

Varios jóvenes de Soria y Castilla y León han viajado a la zona en El salvador, a conocer “in situ” la evolución de estas mujeres y el trabajo realizado por las ONGS.