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La exposición sobre Doctor Zhivago llega a Duruelo de la Sierra

Hasta el próximo 13 de marzo

La exposición "Doctor Zhivago, cincuenta años" llega a Duruelo de la Sierra tras su paso por la localidad de Gómara donde obtuvo una gran acogida entre los vecinos.

Hoy y hasta el próximo 13 de marzo, el salón municipal de Duruelo acoge esta muestra que ha sido prestada por el Ayuntamiento de Soria a la Diputación Provincial para poder llevarla a distintos municipios de la provincia.

El horario de visitas será de 18.00 a 20.00 horas de lunes a viernes y de 18.00 a 21.00 horas durante los fines de semana.

Tardelcuende y San Leonardo serán los próximos destinos de la exposición que ofrece a los visitantes textos, objetos, fotos, planos y, sobre todo, recuerdos recopilados en un documental de Lucas Caraba.

Con esta exposición, la Diputación provincial de Soria mantiene su apuesta por acercar la cultura a los distintos municipios de la provincia, siendo en este caso cuatro localidades las que se beneficien de la muestra al haber estado directamente relacionadas con el rodaje de la cinta. 

La exposición permite recordar la película Doctor Zhivago a través de un documental con 20 voces de personas que contribuyeron al rodaje de la cinta, que se completa con distintos objetos, material e imágenes de la época.

Contenido

Entre los elementos que componen la exposición destacan algunos de forma especial como una primera edición del libro en inglés Doctor Zhivago de Borís Pasternak ilustrado de 1956. Esta obra ha sido encuadernada por el Premio Nacional de Encuadernación de 2010 y 2011 Zivor Anguiano, quien lo ha cedido para la exposición.

También se exhiben fotografías cedidas por Gil Parrondo, Miguel Sancho y vecinos y vecinas de Soria, además de planos de la reconstrucción de las calles de Moscú, documentos emitidos durante el propio rodaje como impresos de pago o elementos de atrezo como un trineo usado en el rodaje.

Especial mención merecen también las fotografías de Teodoro de Miguel así como las instantáneas del archivo de Salvador Vives y Amador Carrascosa, quienes participaron en el rodaje y pudieron inmortalizar estas escenas.