Castilla y León pierde fondos con el actual modelo autonómico de financiación
Es la segunda comunidad más damnificada, según resalta la Junta
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Castilla y León ha recibido de media el 6,5 por ciento de los fondos asignados por el modelo de financiación entre las 15 autonomías de régimen común desde su entrada en vigor en 2009 hasta el último ejercicio liquidado, 2014, un porcentaje que contrasta con la cuota del 7,3 por ciento percibida con el anterior sistema, que reguló el reparto de recursos entre 2002 y 2008.
El resultado es que la Comunidad ha visto reducido en más de un 10,4 por ciento su peso relativo en la financiación autonómica, lo que demuestra que el modelo actual ha sido perjudicial para los intereses de los castellanos y leoneses.
De hecho, es el segundo territorio más damnificado, solo por detrás de Extremadura, según ha resaltado hoy la Junta de Castilla y león en un comunicado.
Este análisis comparativo se ha realizado tomando como referencia la cuantía que han ingresado las comunidades sin aplicar su capacidad normativa, puesto que sumar estos fondos impediría contrastar las cifras en términos homogéneos, dada la ausencia de armonización fiscal entre territorios.
Por lo tanto, para este cálculo se ha excluido del cómputo la recaudación de los tributos cedidos –Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, Sucesiones y Donaciones, Juego y tasas por servicios transferidos–, la derivada del impuesto sobre determinados medios de transporte y la correspondiente a la tarifa autonómica del Impuesto sobre las Ventas Minoristas de Determinados Hidrocarburos.
Reparto
Conforme a los criterios anteriores, cabe concluir que el mejor ejercicio para Castilla y León fue 2010, cuando recibió el 6,65 por ciento de los fondos distribuidos entre las autonomías, si bien cabe precisar que en este ejercicio se incorporaron plenamente los recursos adicionales que el Gobierno central había agregado al modelo de financiación un año antes, coincidiendo con la fecha de su aprobación.
Por el contrario, 2012 marcó el peor registro para la Comunidad, ya que solo percibió el 6,4 por ciento de los fondos totales.
La cuota castellana y leonesa de la financiación autonómica ha sido sensiblemente mayor en cualquiera de los ejercicios liquidados con el anterior modelo y ha oscilado entre el 7,43 por ciento logrado en sus dos primeros años de aplicación -2002 y 2003-, y el 7,12 por ciento en el último, 2008.
La Dirección General de Tributos y Financiación Autonómica de la Consejería de Economía y Hacienda ha realizado estas mismas operaciones con el resto de comunidades de régimen común –todas salvo País Vasco y Navarra–, a partir de los datos oficiales de liquidación publicados por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, y ha calculado el promedio de la financiación recibida por cada una con cargo a los dos modelos más recientes.
Cinco comunidades ganan peso
La primera conclusión que se obtiene es que cinco autonomías han ganado peso relativo con el actual sistema, destacando en primer lugar Baleares (un 27,1 por ciento), seguida por Madrid (16,6 por ciento), Cataluña (14,7 por ciento), Comunidad Valenciana (3,4 por ciento) y Murcia (0,6 por ciento).
La mayor representatividad conseguida por estos cinco territorios ha ido en detrimento del resto, especialmente de Castilla y León y de Extremadura, cuyo retroceso en términos porcentuales alcanza los dos dígitos.
En concreto, la comunidad extremeña ha visto caer su peso relativo sobre el conjunto de la financiación un 13,7 % con el actual modelo y Castilla y León, un 10,4 por ciento.
Siguiendo este orden, a continuación se sitúan Canarias y Andalucía, que han cedido casi un 10 por ciento cada una, Galicia (8,9 por ciento), Asturias (7,8 por ciento), Castilla-La Mancha (6,5 por ciento), Cantabria (2,5 por ciento), Aragón (2,3 por ciento) y La Rioja (0,8 por ciento).
Insuficiencia financiera del modelo
Con independencia del peso relativo que ganan cinco autonomías y pierden diez, una consecuencia común que han sufrido todas ha sido la insuficiencia financiera.
Tomando como referencia 2010 –por ser el ejercicio en el que tienen sus efectos plenos los recursos adicionales incorporados al modelo– y 2014 –por tratarse del último ejercicio liquidado–, la disminución de fondos del sistema se cifra en 4.630 millones de euros, es decir, un 5 por ciento menos.
Esta reducción es superior a la experimentada por el Producto Interior Bruto (PIB) de España, que en estos ejercicios de crisis se contrajo un 3,7 por ciento en términos nominales.
Por lo tanto, la segunda conclusión que puede extraerse, según la Junta, es que la financiación de las comunidades autónomas ha perdido peso en relación con el tamaño de la economía nacional-
Castilla y León ha recibido de media el 6,5 por ciento de los fondos asignados por el modelo de financiación entre las 15 autonomías de régimen común desde su entrada en vigor en 2009 hasta el último ejercicio liquidado, 2014, un porcentaje que contrasta con la cuota del 7,3 % percibida con el anterior sistema, que reguló el reparto de recursos entre 2002 y 2008.
El resultado es que la Comunidad ha visto reducido en más de un 10,4 por ciento su peso relativo en la financiación autonómica, lo que demuestra que el modelo actual ha sido perjudicial para los intereses de los castellanos y leoneses.
Territorio damnificado
De hecho, es el segundo territorio más damnificado, solo por detrás de Extremadura.
Este análisis comparativo se ha realizado tomando como referencia la cuantía que han ingresado las comunidades sin aplicar su capacidad normativa, puesto que sumar estos fondos impediría contrastar las cifras en términos homogéneos, dada la ausencia de armonización fiscal entre territorios.
Por lo tanto, para este cálculo se ha excluido del cómputo la recaudación de los tributos cedidos –Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, Sucesiones y Donaciones, Juego y tasas por servicios transferidos–, la derivada del impuesto sobre determinados medios de transporte y la correspondiente a la tarifa autonómica del Impuesto sobre las Ventas Minoristas de Determinados Hidrocarburos.
Conforme a los criterios anteriores, cabe concluir que el mejor ejercicio para Castilla y León fue 2010, cuando recibió el 6,65 por ciento de los fondos distribuidos entre las autonomías, si bien cabe precisar que en este ejercicio se incorporaron plenamente los recursos adicionales que el Gobierno central había agregado al modelo de financiación un año antes, coincidiendo con la fecha de su aprobación.
Por el contrario, 2012 marcó el peor registro para la Comunidad, ya que solo percibió el 6,4 por ciento de los fondos totales.
La cuota castellana y leonesa de la financiación autonómica ha sido sensiblemente mayor en cualquiera de los ejercicios liquidados con el anterior modelo y ha oscilado entre el 7,43 por ciento logrado en sus dos primeros años de aplicación -2002 y 2003-, y el 7,12 por ciento en el último, 2008.
La Dirección General de Tributos y Financiación Autonómica de la Consejería de Economía y Hacienda ha realizado estas mismas operaciones con el resto de comunidades de régimen común –todas salvo País Vasco y Navarra–, a partir de los datos oficiales de liquidación publicados por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, y ha calculado el promedio de la financiación recibida por cada una con cargo a los dos modelos más recientes.