Barcones presenta 37 medidas contra despoblación
La viceportavoz socialista en las Cortes de Castilla y León, Virginia Barcones, ha defendido una batería de 37 medidas para frenar la despoblación de la Comunidad y ha pedido a Ciudadanos que “reflexione” si quiere “seguir blanqueando” las nefastas políticas del PP para frenar la despoblación.
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En su intervención ayer ante el Pleno, ha lamentado que el PP lleve gobernando 33 años la Comunidad “que más y en mayor medida sufre los efectos de la despoblación” por lo que ha pedido al PP que “asuman su responsabilidad y estén a la altura de las circunstancias”.
Barcones ha defendido con ahínco que “no nos queremos marchar ni ver cómo se van nuestros hijos” porque “sus políticas (del PP) nos están matando”.
Por eso, ha subrayado que Castilla y León necesita un marco estratégico para una política de población propia ajustada a nuestra evolución demográfica, a nuestras fracturas territoriales, a nuestro modelo institucional y a lo que exige nuestro Estatuto de Autonomía. Y todo ello acompasado con el marco nacional y europeo para dar coherencia a estas políticas.
Barcones ha reclamado al Gobierno de Mañueco que abandone “esa táctica infantil de decir que el problema es nacional y europeo” porque, en lo que llevamos de siglo XXI, todas las provincias de Castilla y León reducen su peso en la economía nacional. Además, señaló que en el grupo de las provincias que cuentan con los peores registros demográficos se encuentran 11 provincias, de las que siete son de Castilla y León.
También se ha mostrado crítica porque “es desolador ver cómo en el presupuesto el principal problema estructural de nuestra tierra estaba ausente y no consintieron ni admitieron rectificación”.
Por eso, Barcones ha aportado hasta 31 medidas para frenar la despoblación: un mapa de zonas con prioridad demográfica, el desarrollo del Fondo Autonómico de Compensación y el Plan Plurianual de Convergencia Interior, la asignación de inversiones en las zonas de prioridad demográfica, la dotación de medios técnicos y personales en los servicios básicos esenciales, con especial incidencia en la sanidad y la educación; la aplicación de incentivos adicionales para promover la implantación de actividades económica; la participación de las entidades locales en la gestión de fondos europeos; oficinas de lucha contra la despoblación; un plan de retorno de los jóvenes emigrados; o un informe previo de evaluación de impacto demográfico “para que sepamos lo que hacemos cuando legislamos y planificamos la acción pública”.
Además, ha subrayado que el fondo de recuperación europeo Plan Next Generation UE “es una oportunidad única para la transformación del modelo productivo y de la propia administración de la Comunidad”.