Soria, escenario de cine
Julián de la Llana
Son numerosos los factores que influyen en la calidad de una película. Uno importante en los rodajes, aunque suele pasar desapercibido para el gran público, es el de las localizaciones. El realismo, la belleza o la espectacularidad de una secuencia puede depender en gran medida del lugar donde se filme y, por eso, la búsqueda y selección de espacios ha sido siempre una cuestión prioritaria en la planificación de las grandes producciones cinematográficas.
Para facilitar esta labor, se han creado a nivel internacional, estatal, autonómico o local las denominadas Film Commission, entidades encargadas de facilitar los escenarios naturales para una película o un spot publicitario y toda la información que precisen para la realización de rodajes en un determinado lugar. Entre sus objetivos se encuentran la promoción cultural y turística de la zona, así como el incremento de la producción audiovisual. En Castilla y León existe una Film Commission regional y varias provinciales, pero no en Soria.
Nuestra provincia es rica en paisajes, muy variados; es rica en patrimonio artístico y es rica por sus gentes. Esa variedad en paisajes y en arte, y la disponibilidad de sus habitantes, ha hecho que a lo largo de casi cien años se hayan acercado directores del cine español y cineastas de prestigio internacional (Orson Welles, David Lean, Richard Lester, Franklin Schaffner) hasta Soria para recoger su naturaleza y su patrimonio artístico en grandes superproducciones. Y que una veces, sí, nuestra tierra haya figurado en la pantalla para ser la profunda Castilla rural y la patria del conde Fernán González, pero otras muchas, la Rusia de los zares y de la Revolución, la Inglaterra medieval, la Francia de Richelieu y los Mosqueteros y hasta el Oeste americano o un espacio sideral después del fin del mundo.
