Adiós a una plaza fuerte

{1812}

La ciudad de Soria nació y creció, tras la Reconquista, a la sombra de su castillo y su recinto amurallado, que protegía cien hectáreas con su perímetro de más de cuatro kilómetros, que hizo de Soria una plaza inexpugnable. Fue el mariscal de campo español José Durán, quien, en la toma de posesión de la ciudad en la primavera de 1812, ordenó la demolición de las murallas y la voladura del castillo, para dejar abiertas todas las plazas fuertes para que no pudieran servir de nuevo de apoyo a las tropas francesas. Con esta decisión, terminó para siempre la importancia militar que Soria conservaba.

1581. El convento de Nuestra Señora del Carmen, el mejor conjunto de estilo barroco construido en la capital, es una fundación personal de Santa Teresa de Jesús. Fue el décimo quinto convento fundado por la religiosa. Una ruta unirá a  partir de octubre de este año las diecisiete ciudades donde Santa Teresa fundó conventos.