Viernes, 19 Abril 2024
Buscar
Despejado
1.3 °C
El tiempo HOY

belleza

Sí al sol, no a los kilos

Cuida tu nutrición durante el verano

Llega el verano, las cañas, los helados, el picoteo y las celebraciones varias, que invitan a todo tipo de excesos gastronómicos. Eso sí, a la hora de ponerte el bikini, no hay nada más que lamentaciones y arrepentimiento. Sigue nuestras recomendaciones y supera el verano sin ganar peso.

 

alt=

Esta época de fiestas, barbacoas, comidas entre amigos y celebraciones no es la más adecuada para ponerse a dieta. Llega el verano y lo que más nos apetece es disfrutar sin tener que agobiarnos por esos kilos de más en nuestro peso habitual. Unas pautas y unos trucos te ayudarán a mantener tu línea sin tener que privarte de los pequeños placeres culinarios y sociales del verano.

Entre los animales salvajes que viven en libertad la obesidad no existe. Así, por ejemplo, un leona nunca diría “como hoy es la boda de mi prima, me voy a comer dos antílopes en lugar de uno”. Simplemente, come hasta que se sacia y no vuelve a comer hasta que tiene hambre de nuevo.

Los humanos, y también los animales de compañía, hemos perdido esta capacidad y, aunque ya estemos llenos, muchas veces seguimos comiendo. La clave debería estar en reconocer cuándo estamos saciados y dejar el tenedor en la mesa. Si esto es difícil, prueba estas otras estrategias que te vamos a dar que te alejarán de las tentaciones o te ayudarán a compensar los excesos.

Los aperitivos que preceden a la comida suelen ser grasos y poco saciantes, por lo que no somos conscientes de las calorías que nos aportan. Lo mejor sería evitarlos, pero si resulta complicado, decántate por queso fresco o semi, marisco y moluscos (mejillones, almejas...); y evita fritos y canapés.

La atracción principal de estas reuniones es el encontrarte con amigos, colegas o familia y no la comida. En vez de tener todo el rato la boca llena, aprovecha esos momentos para conversar. Un truco es masticar discretamente chicle durante el aperitivo; ésto te ayudará a no picar hasta sentarte.

Otra idea es que los días previos y posteriores a un día de comilona, haz un plan compensatorio con comidas más ligeras. Cada día se puede consumir una cantidad determinada de calorías; por lo tanto, si reservamos la mayoría de éstas para la comida o cena especial, es posible cometer algún exceso, sin ganar peso.

Se recomienda que la infesta antes y tras el banquete sea mínima y a base de ensaladas, fruta, mucha agua y yogures desnatados, entre otros.

Además, intenta no llegar con mucha hambre a la comida. Toma un tentempié sano en casa antes de salir: una fruta, una zanahoria, una infusión... En concreto, se recomienda ingerir medio litro de bebida isotónica y una pieza de fruta treinta minutos antes de la comida copiosa. De este modo, tendrás la sensación de haber comido y será más fácil moderar tu conducta en la mesa.

Si eres tú la que prepara la comida, intenta planificarla de manera que no sobre nada, o será tu perdición. Elije recetas sabrosas, pero ligeras. Para acompañar los platos principales escoge verduras, setas o patatas hervidas, en lugar de fritos. Como entrante, puedes seleccionar ensaladas refrescantes (pepino con yogur o berenjenas asadas con especias), acompañadas de palitos de verdura (apio, zanahoria, pepino, rábanos...). Un buen gazpacho, además de refrescante resulta de lo más apetitoso. Puedes ponerle jamón picadito e incluso unos picatostes al lado para quien no resista la tentación. No es cuestión de que nuestra mesa parezca un culto al cuerpo. En cuanto al plato principal, el marisco es una opción excelente para una buena celebración con pocas calorías. Lo único malo, es el precio.

EVITA EN TU CARRO DE LA COMPRA LA BOLLERÍA INDUSTRIAL O LAS CHUCHERÍAS INNECESARIAS. CÁRGALO DE FRUTAS, ENSALADAS Y ZUMOS REFRESCANTES.

 

 

alt=

Lo informal

Las comidas de pie y picoteo son muy traicioneras. Solemos picotear sin control. Lo mejor para controlar ésto, es hacernos con un platito y servirnos lo que vayamos a comer. En el postre decántate por una fruta fresca o lo que más se asemeje a ella. Un dulce con moderación para finalizar, por supuesto, está más que permitido.

Decir no

No tienes por qué comerte todo lo que te pongan. Si te ofrecen más, recházalo con un “no gracias, estoy muy llena”. Un truco que recomiendan algunos endocrinos es acudir a las cenas o comidas especiales con ropa o cinturones ajustados. Así será más fácil darnos cuenta de cuando estamos llenas.

Comparte esta noticia

Últimas fotogalerías

Sección: belleza

Subsección: Belleza

Id propio: 2978

Id del padre: 57

Vista: article

Ancho página: 0

Es página fotos: 0

Clase de página: noticia